La furia y otros buenos sentimientos

Ando triste y cariacontecido. La administración vuelve a castigarme impunemente, me retira el vehículo, el tuppermóvil, y me sanciona con un multazo del copón de la baraja. En este estado depresivo me siento frente a ustedes y me debato entre la ira y la furia, la cólera y el odio ciego y furibundo ante el sistema, el sentimiento de venganza y el rencor más atávico que un ciudadano de la capital del reino pueda alimentar. Pero respito hondo y recuerdo que el mundo es un lugar donde también cabe la belleza, los sentimientos puros y el buen corazón. Por eso, me lanzo irrefrenablemente a la conquista youtube y recupero para mis queridos internautas momentos de grandeza anteriormente prometidos. El análisis de ese antropólogo tribal llamado Broncano, el descubrimiento de un ejemplar editorial único en el mundo berraco y las instantáneas de un imbatible fucker. Ante semejantes alicientes, ¿no merece la vida ser vivida?

Delicioso librito adquirido en nuestro viaje a Londres. Recetas de cócteles y fotos a todo color de cachondonas de mirada ilustrada. Directamente importado del mercado sueco.

Abajo, imágenes impagables de Richard Branson con una chati en la chepa. En la chepa... y en cueros. Gracias de nuevo, Oswaldo Cornelius.