jueves, julio 30, 2009

Chof: verano en remojo

¿Cansado de ser la croqueta más atractiva de las playas españolas? ¿odias el tufo a fritanga del chiringuito? ¿tienes alergia a la sal marina? Repámpanos rinde tributo a la piscina en su versión 2.0, la que supone la definitiva superación de aquellos complejos inolvidables de nuestra infancia, con señores mirones, delincuentes de cinco años, familias numerosas saltando la valla de acceso, toboganes asesinos y top-less amojamados.

Espacios públicos:

Les Bains des Docks, Le Havre (diseño de Jean Nouvel)


Leça de Palmeiras, Oporto (diseño de Álvaro Siza)


Hoteles:
Hilton Auckland, Auckland

Gansevoort, NYC


Termas de Vals, Suiza (diseño de Peter Zumthor)


La Purificadora, Puebla (diseño de Ricardo Legorreta)

Trisara, Phuket


Room Mate Grace, NYC


Caruso Ravello, Ravello


Axel, Barcelona

lunes, julio 27, 2009

Viva la cocina molecular, Francisco y Chimo Bayo

Regreso a Valencia casi un año después de nuestro último encuentro. Esta vez no nos adentramos en la capital del Túria sino que nos desviamos al norte dirección Sagunto y emprendemos viaje de interior, de huerta, parque natural y valle frondoso, el de Palancia. Guiados por la columna de humo y la flota de hidroaviones que tratan de sofocar el incendio más devastador de la provincia en este fin de semana abrasado, llegamos a Algimia de Alfara, con su pueblo simétrico, Alfara de Algimia, a unos pasos. A ambos flancos, La Calderona y la Sierra d'Espadá. En medio, un vergel cuajado de buganvillas, glicinas y naranjos. Nuestro hogar por un par de noches en las que reina el silencio conventual resquebrajado con las claritas a ritmo de gallo despertador. Qué digo claritas, antes de las seis de la mañana ya estiran el gaznate y hacen vibrar la campanilla para comunicarse con sus vecinos. Qué majos ellos, qué madrugadores. Por lo menos otros congéneres emplumados nos han dado sustento al permitirnos dar buena cuenta de sus ovodeposiciones. Huevos escalfados de gallinácea del Japón. Huevo frito de pava real. Manjares de toma pan y moja. Es parte de los placeres impartidos en El Secanet, lugar casi secreto pero voceado de boca a oreja, como un tesoro invisible al alcance de los dedos. No cuento más, mejor rastreen ustedes, investiguen, formen parte activa de su concepto revolucionario. Chitón, no lo griten. Shhhh, en bajito. Que sí, que forma parte de la misma tierra en la que Francisco, ese hombre que de puro alcoyano es todo voz de himno valenciano, brincara de la nadería al estrellato de cuarto y mitad de víscera, y de la misma tierra que vio nacer a Don Joaquín Bayo, de sobrenombre Chimo y de profesión entretenedor y mezclador de la fiesta.
Valencia, de todo menos aburrida. Valencia, de tó menos indiferente. El siguiente capítulo podrá versar sobre el mundo de las niñas mascachapas y las playas de color hez. Por cierto, se confirma: ponga en Valencia un puesto de implantes mamarios y hágase millonario.

martes, julio 21, 2009

La mayor historia (mentira) jamás contada

Pongo la tele anoche y me encuentro con los caretos de Donald Rumsfeld, Henry Kissinger y Richard Helms, éste último director de la CIA durante el mandato Nixon, los otros dos de fama sobradamente conocida allende los mares. Resulta que es el día de la luna y su conquista yanqui. Se trata de un documental que no he visto empezar. Estos tipos, además de algún otro de similar corte tenebroso, recuerdan orgullosos ante la cámara las circunstancias en las que Nixon –sí, esa cabezota loca que sale en Futurama- quiso llevar a cabo un plan tan inverosímil como fascinante. Como desde la NASA le auguraban que no se podrían mandar imágenes de los primeros pasos del hombre sobre la superficie lunar, ante la ira desatada del presidente, su fiel consejero Rumsfeld le sugirió al oído la posibilidad de rodar unas cuantas escenas y de hacer unas cuantas fotos de ese momento único en el devenir de la historia y clave en la victoria definitiva del imperio norteamericano sobre el gigante diablo ruso improvisando un tinglado hollywoodiense. El documental venía a corroborar las tesis conspiranoicas de tongo total pero multiplicado exponencialmente. La bandera ondeando al viento inexistente de la luna, la cámara Hasselblad resistiendo temperaturas extremas, la huella profunda del astronauta Armstrong en una gravedad que le hacía pesar no más de 30 kilos, la iluminación de estudio de las fotos que pasaron a la posteridad… ¡Hasta una foto de Kubrick –al que acudieron para poder filmar todo en los estudios de la MGM de Londres- abandonada en la superficie del falso satélite! Todo.

Bueno, todo no. También se abordaba el cague que le pudo entrar a Nixon ante la posibilidad de ser descubierta tan fantástica chapuza y la consiguiente operación puesta en marcha para buscar, cazar y eliminar todo testigo del rodaje. El doble de personal armado que fue destinado para dar con los huesos de Sadam. Todos muertos en accidentes sospechosos. Uno de los últimos supervivientes de aquello liquidado diez años después tras ser encontrado en una escuela judía de Nueva York. ¡Diez años después! Rumsfeld no se corta al justificar dicha decisión. Yo trago saliva. No doy crédito. El más divertido todavía lo pone Vernon Walters, un veterano general y diplomático norteamericano que accede a contar más de la cuenta pero a micrófono cerrado. Esa misma noche le da un yuyu cerebral y casca. Ayayay. Cuando los ojos se me salen ya de las órbitas y estoy a punto de preparar un kit de salvamento para huir del país por haber sido espectador de tanta información clasificada, aparecen de nuevo todos estos energúmenos más relajados, descojonándose a mandíbula batiente en plan tomas falsas. El documental es un vacile. Se llama Operación Luna (The dark side of the moon). Me lo había tragado enterito. Era todo mentira. ¿Seguro?
Aquí una persona de mi entorno más cercano, N.P.B. (doy sus iniciales porque todavía tengo mis recelos y hay que ser prudentes) sigue pensando que todo aquello fue un montaje, que la llegada del hombre a la luna pudo ser la gran mentira de la historia de la humanidad. Ver desfilar mentes tan siniestras y peligrosas como las que salen en la película, aunque sólo sea para ajustarse a un guión de sainete, no deja de ser poco tranquilizador. Si estas personas todavía gobiernan su país y el mundo desde las sombras estoy dispuesto a creerme casi todo. Lo que está claro es que Nixon y su época siempre proporcionará parte de la mejor literatura chunga del siglo pasado. Ustedes verán si se la creen o prefieren sonreír.

viernes, julio 17, 2009

El salvaje está cansado…

Un grupito de coleguitas en edad de merecer

… pero quiere más. Ayer Jerry Lee Lewis demostró en su concierto del Festival Veranos de la Villa de Madrid que es un adolescente en el cuerpo de un anciano. Pasado un buen rato en el que la banda de acompañamiento se dedicó a calentar al personal interpretando estándar tras estándar igual que lo vienen haciendo durante toda una vida, un punto rojo apareció en escena. Con camisa ídem, para destacar entre sus músicos enfundados en negro riguroso, un abuelo encorvado pero todavía con una buena mata de pelo rizado atraviesa el escenario. La gente se vuelve loca. Por fin. Es Jerry Lee. Se sienta en su piano negro acharolado y el animal de Louisiana balbucea frases de bienvenida y agradecimiento. Empieza el concierto. Down the line y los pies sobre el andamiaje de Puerta del Ángel sucumben al ritmo endiablado de las teclas aporreadas. No hay quien aguante sentado, mire usted. Por eso, servidor y compañía decidimos bajar a territorios más plebeyos y entregarnos a la danza demoníaca de un rock vacilón salpicado de otros ritmos sureños igualmente seductores. Un poco de gospel, un poco de balada country. Vuelta al rockabilly para alegría de algún que otro clon de Carlitos Segarra que luce sombrero cowboy entre los más de 2.000 espectadores de la gala. Eh, chitón. Georgia on my mind. Palabras mayores de licenciatura musical yanqui. ¡Jerry Lee, queremos boogie-woogie! Casi una hora después de arrimarse al piano, afronta el desenlace con Johnny B. Goode, y encadena los dos pelotazos esperados: Great balls of fire y Whole lotta shakin’ goin’ on. Cerramos los ojos y parece mentira, no tenemos que hacer muchos esfuerzos para transportarnos a un mundo lejano pero conocido. Volvemos a abrirlos y allí sigue Jerry Lee Lewis, el abuelo con camisa roja, deslizando el índice de la mano derecha por el teclado, moviendo sus manos más deprisa de lo que es capaz de hablar. Sin cerrar el último tema, se baja en marcha, se incorpora y saluda a su público bailón. Mientras la banda continúa el espectáculo, The Killer vuelve a atravesar el escenario en sentido apuesto. A medio camino, se da la vuelta como queriendo hacer la última intentona. Joder, soy Jerry Lee. Vuelve a saludar, acierta a mover sus largos brazos al son de la música en un pase de baile septuagenario, se vuelve a parar frustrado porque sus piernas ya no le responden. No ha pateado el piano. No lo ha incendiado. Se tiene que conformar con un recital domesticado a la fuerza. La edad y el tiempo no perdonan ni al más salvaje de los rockeros. La decrepitud de un anciano nos recuerda que la vida es un asco, que todo pasa, que Johnny Cash murió hace tiempo, que ya nadie (casi) baila con zapatos de gamuza azul y que Elvis para muchos siempre ha sido un espejismo deformado. Ni siquiera Jerry Lee Lewis puede ganar una guerra en la que tantas veces ha salido victorioso.

jueves, julio 16, 2009

¡Yo veré a The Killer!

Amiguitos y amiguitas, estoy emocionado. Esta noche me vestiré con mis mejores galas, me engominaré el tupé y pondré rumbo a Memphis. Lo último es figurado, que conste, el viaje es sólo mental, qué coño, espiritual, diría yo. Voy a ver a un tipo que pronto cumplirá 74 primaveras sentadito en su butaca. Se llama Jerry Lee Lewis y no es más viejo que cualquiera de nosotros. El último superviviente del clan de Sam Philips, el mítico Million Dollar Quartet, aporreará para mi y unos cuantos palurdos más su piano, ignífugo desde hace demasiado, pero siempre a la espera de que se le prenda la mecha. Mañana podré decir eso de: "yo vi a The Killer".



lunes, julio 13, 2009

Surfea el verano, insensato!!

El calor aprieta y nada mejor que música surf para levantar el ánimo. Desde la factoría de Muuu Dj Compilations queremos anunciar el próximo lanzamiento, el que será el séptimo volumen de la colección y que tendrá en el surf a su hilo conductor. Ventures, Link Wray, Beach Boys, Jean & Dean, Los Coronas, Man or Astro-man?, Straitjackets... Canelita fina de ayer y de siempre. Sean pacientes, por ahora se tendrán que conformar con un paipay y la esperanza de poder exprimirse el sudor en un chiringuito de Torrevieja a ritmo de Fender. Kawanga!!

viernes, julio 10, 2009

Las estrellas lo comparten todo

Puede que nuestro gurú social Oswaldo Cornelius sacase el suficiente jugo en su momento a estas dos imágenes tomadas con varias décadas de diferencia. A la izquierda, Britney Spears acudiendo a una fiesta de Halloween. A la derecha, David Lee Roth, cantante de Van Halen, en una ídem (o lo que sea) a mediados de los ochenta.
Cosas a destacar:
- Sí, al parecer comparten el mismo vestuario.
- Diamond Dave era más locaza que la rubia cantante. La rubia es Britney, no... Bueno, las dos son rubias, y más rubia que Diamond Dave no hay nadie... Vaya lío.
- El sello de Diamond Dave Enterprises nos indica el grado de carroña y avaricia empresarial que ha obsesionado al elástico frontman durante toda su carrera. Además, si es suya, ¿por qué no quiere esconder bajo llave la foto? Pues eso, se gusta.
- Si atendemos a la foto de abajo donde se muestra el disfraz de Britney en todo su esplendor, descubrimos que en realidad, como apuntaron los gacetilleros más resueltos, la cutrediva se disfrazó de su propia vagina. Tremendo.

No se pierdan la caprichosa silueta de la transparencia en su torso...

martes, julio 07, 2009

Jornadas de convivencia

Perdonen mi silencio bloggero pero aún me estoy lamiendo las heridas tras un fin de semana cuya rutina empezó el jueves y se dio por concluida el domingo en condiciones físicas y mentales francamente mejorables. Como sobran las palabras y, sobre todo, los adjetivos, casi mejor ilustrar estos días alejados de toda clase de normalidad/moralidad con un par de instantáneas representativas.

Hay gente que jura haber visto a Hulk Hogan en la sección de lencería femenina del Centro Comercial de Sanchinarro

Si la montaña no va a Mahoma...

Actividades recreativas de fin de semana

jueves, julio 02, 2009

Pichar... discos


Como ya anticipamos ayer, esta noche tendrá lugar una de las celebérrimas sesiones musicales protagonizadas por el trío anteriormente presentado y que, en esta ocasión, será en una de sus residencias habituales: el FotomatónBar de Madrid. Haciendo memoria, me acordé de uno de los descubrimientos a los que nos tiene acostumbrados nuestro admirado Oswaldo Corneluis. Se trata de Lauren Pope, la simpática criatura platina de las imágenes. Resulta que la susudicha tiene un oficio de lo más particular. No queridos, no es el que están pensando. Bueno, igual tiene varios. El caso es que... ¡¡es DJ!! Y claro, desde aquí quiero hacer un llamamiento a los encargados de confeccionar los programas de los garitos más selectos de la capital. ¿No podrían contactar con semejante profesional? Lo digo porque siempre sería un placer poder ejercer plato con plato con una maestra como Pope, experta en el arte de la confección technotrónica y el house tribalero, entre otras especialidades amator... digooo discotequeras. Es una sugerencia, nada más.

¿Ven? No les engañaba...

Nuestra futura maestra envuelta (literal) en una de sus aclamadas sesiones musicales junto a una lugarteniente de semejante factura. Puede que incluso tengan dificultad para distinguirlas.

miércoles, julio 01, 2009

Pinchada en el FotomatónBar



Un soplo: este jueves, un trío a los platos hará las delicias de grandes y pequeños. La pinchada tendrá lugar en el FotomatónBar de Madrid dentro de su habitual programación y abriendo el mes de julio. Ya saben, no deben perdérselo, son de fiar. ¡El trío es salud!