miércoles, septiembre 24, 2008

¡Viva Quini!

Hoy a Quini le dan un homenaje en el Bernabéu.
En principio no me mola demasiado el escenario, pero qué le vamos a hacer, cualquier sitio es bueno para recordar a uno de los mejores delanteros que ha tenido nunca el fútbol español. Sus problemas de salud parece que han acelerado este reconocimiento pero, por lo menos, han servido para acercarle un poco a la gente, devolverle a la esfera pública y desempolvarlo del recuerdo en color sepia. ¿Conservan algún cromo de El Brujo? Yo sí. Y es que para mí siempre será uno de los elegidos, uno de los tipos a los que más he admirado y de esos a los que te apegas sin demasiada racionalidad, porque cuando eres un enano te gustan las cosas por narices y se acabó. Me gustó el Barça y me gustó Quini. Punto. Porque sí. Como me gustaron Marquitos Alonso o, claro, Maradona. Aunque con Maradona te dabas cuenta de la razón. Era diferente, saltaba a la vista, aún para un chaval de siete años.
Con Quini debía pasar que metía mogollón de goles –siete trofeos Pichichi son muchos goles uno detrás de otro- pero también que el tipo me caía bien. Desprendía honestidad, curro, verdad. Me acuerdo de sus cabezazos, de cómo se tiraba por los suelos para alcanzar el balón, de cómo celebraba los goles. Qué tiempos, de cuando el fútbol se mezclaba con el barro.
Ya con anterioridad hemos traído a este blog la figura de Quini, mostrando una pancarta que pedía su libertad en momentos de su secuestro, pero esta vez es diferente. Hoy vuelve al campo.

2 comentarios:

Unknown dijo...

También me sorprendió que lo hicieran en el Bernabéu. Podrían haber esperado a que jugara el Sporting en Barcelona, no?
Y encima el pobre tuvo que aguantar que destrozaran a su Sporting...

El turista dijo...

Una pena, sí. Pero bueno, hasta el alemán demostró su cariño hacia él. Todo el mundo le adora.